La Navidad es el periodo perfecto para encontrarnos con los que más queremos y con aquellos que durante el resto del año no vemos tanto como nos gustaría. Muchas veces, nuestros familiares vienen de lejos a pasar con nosotros estas fechas tan especiales y, más allá de los regalos y de organizar las comidas y cenas con ellos, lo que más nos gusta es pasar un tiempo de calidad todos juntos.
Por eso, la Navidad se convierte en un momento idóneo para inmortalizar esas reuniones y sacar una o varias fotografías de familia. Desde La Cabina Gris secundamos totalmente la moción.
¿Se os ha ocurrido inmortalizar ese momento delante de un photocall con un original atrezzo? En este post os damos varias ideas para que podáis llevarlas a cabo y sea una sesión de lo más divertida. El atrezzo corre de vuestra cuenta porque el fotomatón ¡ya lo ponemos nosotros!
Para que sea una jornada original y divertida no hace falta que os gastéis mucho presupuesto en la confección de los complementos. ¿Habéis pensado en utilizar los espumillones que no hayáis utilizado para adornar el árbol? Podéis crear unas bonitas boas navideñas con ellos. No importa de qué color los elijáis, lo importante es que queden vistosos en las fotos.
Seguro que también guardáis algunos gorros, matasuegras o gafas de cartón de la Nochevieja pasada. ¡Este es un buen momento para sacarlas! Si sois de las familias que no tienen ni pizca de vergüenza a la hora de sacaros fotos, ¿por qué no fabricar unos originales colgantes o pendientes con bolas de Navidad?
Los gorros de Papá Noel tampoco pueden faltar en una sesión de fotos navideña. Si sois muy atrevidos, también podéis utilizar una gran barba blanca o incluso un disfraz entero de Papá Noel. A estos complementos tan divertidos podéis añadir un gran fondo donde se vea una chimenea de la que cuelguen varios calcetines o un paisaje invernal inspirado en el Polo Norte.
¿Preferís colocar diferentes muebles donde poder sentaros todos los miembros de la familia? Apostad por el tradicional sofá. Si se os da muy bien esto de las manualidades, dejaros la piel ideando un bonito trineo de Papá Noel.
Unas diademas con la cornamenta de un reno o la nariz roja de Rudolf no deben dejarse fuera de un photocall navideño. Si habéis celebrado una fiesta recientemente, utilizad esos complementos: bigotes, labios, una botella de champán, una pajarita o, incluso, unos bocadillos donde escribir la frase que queráis con tiza, como ‘¡HO, HO, HO!’
Si os apetece crear algo más navideño, basta con dibujar en cartulinas de diferente color elementos relacionados con personajes de esta época: la zanahoria de un muñeco de nieve, un copo, un regalo o las orejas y gorros de elfo. No te olvides de incluir un palo para sujetarlos delante de cámara.
Seguro que con todas estas ideas y un buen fotomatón tendréis las mejores fotografías navideñas que podríais imaginar. Quién sabe, podría convertirse en una tradición más para vuestra familia por estas fechas.