A lo mejor has pensado nada más leer el titular, «¡Menuda americanada!», pero lo cierto es que si has seguido leyendo, es porque de alguna forma, la curiosidad te pica. Puede que porque estés embarazada o porque algún familiar o amiga cercana lo esté.
Y digo yo, ¿qué tiene de malo adaptar costumbres bonitas, divertidas o curiosas de otros países? No hay más que pensar en Papá Noel o en Halloween, aunque son muchas más las cosas que, a diario, tomamos de otras culturas sin darnos cuenta; sin ir más lejos, la alimentación.
Así que si te parece, vamos a dejar la posible polémica de lado y nos centramos en la fiesta del Baby Shower o, como se diría en castellano, la de bienvenida al nuevo bebé. Una fiesta que, en su origen, sólo estaba reservada a los familiares, en concreto, a las mujeres, y en la que las madres, tías, abuelas o demás féminas de la familia daban consejos a la mamá.
Hoy, se trata más bien de un evento social en el que se reúnen amigas y familiares, en la que la madre recibe todo tipo de regalos para su pequeño, incluso para ella misma también o para compartir en pareja.
¿Estás pensando en organizar la tuya o la de alguna amiga o familiar? Entonces toma nota de los siguientes puntos que te voy a dar a continuación.
Cómo organizar una fiesta Baby Shower
Aunque lo más habitual es que esta fiesta la organice una amiga o familiar, también puedes ser tú misma si crees que nadie lo va a hacer y tienes muchas ganas. Sea cual sea tu papel en esta fiesta, los pasos a tener en cuenta son los siguientes:
- Elegir la fecha: lo ideal es que sea en el séptimo u octavo mes de embarazo. Suele ser el periodo más tranquilo del embarazo y el momento más cercano al parto. Además, también es el momento en el que ya se sabe seguro el sexo del bebé, en caso de que te quieran regalar cosas de colores concretos, si bien nosotros creemos en la neutralidad en este sentido.
- Invitaciones: una vez tengas la fecha cerrada, prepara las invitaciones indicando el día, el lugar y la hora. Lo normal es que sea en casa de la embarazada para que no tenga que desplazarse con un montón de paquetes, pero si ésta no tiene sitio o quieres darle una sorpresa, puede ser en casa de la persona que lo organiza o en alguna cafetería o restaurante tranquilo, con un reservado para este tipo de fiestas.
- Decoración: acorde para la ocasión. Por lo general, este tipo de fiestas suelen estar decoradas con tonos pastel, azules o rosas, pero tú le puedes dar el toque que desees. Hay muchas ideas en este sentido. Si le echas un ojo a Pinterest te sorprenderás. Y, por supuesto, también han de adaptarse al gusto de la madre y no, no tienen por qué ser ñoñas. ¡Todo está en tu imaginación!
- Comida: normalmente este tipo de fiestas se suelen preparar por la tarde y suelen ser más bien cosas dulces las que se preparan; principalmente, tarta, galletas, café y té. Pero ya sabes que somos de los que pensamos que en el gusto está la variedad. Así que puedes hacer un bruch, una merienda-cena o, como te decíamos, una simple merienda con una tarta que refleje el motivo de la fiesta o unas galletas de la misma temática. También está la versión cup cake, claro está.
- Fotos: no te olvides de preparar un set donde sacar las fotos. Un fotomatón, como los que encontrarás en nuestra página web es una excelente idea, no sólo para conservar recuerdos para toda la vida, sino para pasar momentos muy divertidos. ¡Pídenos ideas para el atrezzo! ¡Estamos deseando contártelas!